Mira a esa chica / Cristina Araújo Gámir


Premio Tusquets 2022 muy merecido.

Esta novela aborda el siempre difícil y controvertido tema del consentimiento y la agresión sexual. Algo que está muy de moda en la creación cultural independientemente del formato (serie, película, obra de teatro o libro).

Cristina Araújo dibuja con maestría a la protagonista de esta historia narrando con sutileza cómo cada una de las decisiones que toma la abocarán a sufrir una violación en grupo que recuerda a cualquiera de los distintos casos mediáticos conocidos.

Lo cierto es que nunca me hubiera leído este libro de haber conocido de antemano la trama ya que me da pereza por ser un tema tratado hasta la extenuación en los medios de comunicación pero agradezco haberlo cogido al tun tun de la biblioteca y conocer esta historia desde el punto de vista de la protagonista.

Una forma de contarlo sin victimismo, sin odio y sin ninguna reivindicación política ni ideológica. Sólo una historia dura que ocurre, por desgracia, con demasiada frecuencia.

Año de publicación: 2022
Editorial: Tusquets
Páginas: 376
Valoración: muy recomendable

Resumen de la editorial

Una chica sentada en un banco. El día despunta y los estragos de la fiesta de ayer aún se palpan en el ambiente. El tránsito de los que van a trabajar se mezcla con el de los que vuelven a casa arrastrando la borrachera bajo los portales. De camino hacia la parada del autobús, Tallie se detiene de golpe en el bulevar. Le ha parecido reconocer a su amiga Miriam sentada en el banco con el pelo revuelto y la cara desfigurada por ríos de rímel. Solo unos días antes, los jóvenes apuraban las vacaciones en la piscina, felices y despreocupados. Y, aunque le cueste reconocerlo, Miriam sigue colgada de Jordan, pero la frustración de haber sido siempre la chica invisible, y más ahora que a él le gusta Paola, lo va a complicar todo mucho.

Mira a esa chica es la historia de Miriam, de su grupo de amigos y de cómo, a veces, durante la adolescencia podemos encontrarnos con situaciones para las que nadie nos prepara. Porque… ¿se puede preparar a alguien para lo peor?

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